Cuando escuchas el término “cantautor”, la mirada vuelve, irremediablemente, a la España tardofranquista de finales de los 60 y de los primeros 70. Esas imágenes en blanco y negro están llenas de pantalones de campana, patillas gruesas, humo de tabaco, guitarras en ristre, asambleas de estudiantes, canción protesta, grises, carreras por el campus, detenciones y de personajes como Raimon, Lluis Llach, J.A. Labordeta, Paco Ibáñez, Serrat, Sánchez Ferlosio….
Los tiempos cambiaron y llegó la democracia a nuestro país y aquellos cantautores cayeron en decandencia siendo sustituidos por la “movida” de los 80, la transgresión, los pelos de color verde y sobre todo, las ganas de pasarlo bien. Los que hacían música se ocultaban bajo el parapeto de nombres simpáticos como “Jonny Juerga y los que remontan el Pisuerga” o “Glutamato Ye-yé”, otros eran más irreverentes como ”La Polla Records” o “Tarzán y su puta madre buscan piso en Alcobendas”, algunos eran funestos como “Parálisis permanente”, “Siniestro Total” o “Toreros Muertos”, y así hasta el infinito.
Con el tiempo, la sociedad española fue madurando (aparentemente al menos), y entramos en un status de nuevos ricos, snobs y modernos. Por su puesto, la música siguió el mismo camino y durante los 90 y los 2000, el “indie”, la “electrónica” nos mantuvo entretenidos.
Una nueva generación de músicos de aquí está renovando el término ‘cantautor’. En estos tiempos que corren la mayor parte de los cantautores españoles se enfrentan a la realidad musical de nuestro país como sus homólogos de los 70, es decir con nombre y apellidos, de cara, sin seudónimos ni nombres de grupos que los cobijen, aunque quizá sea esta lo único que los acerque a aquellos.
Muchos de ellos provienen de bandas del pop y del rock de que agotaron sus pilas, o que constreñían la libertad creativa del protagonista. Algunos se separan temporalmente de sus grupos, con el fin de oxigenarse y mantienen una carrera paralela en solitario, siendo de esta forma amos y señores de los textos, las composiciones, las compañías….
Otra de las cosas que los separan de sus antecesores es la temática de sus canciones; la protesta ha quedado en un segundo plano (a pesar de que vivimos en una época en la que hay muchas cosas por las que protestar) y se dedican con mucho más interés a bucear en lo profundo de intestinos, hígados y corazón, destripando sentimientos, vivencias, mundos interiores y exteriores, amores y desamores, ruinas vitales y alegrías desaforadas.
Otra de las cosas que los separan de sus antecesores es la temática de sus canciones; la protesta ha quedado en un segundo plano (a pesar de que vivimos en una época en la que hay muchas cosas por las que protestar) y se dedican con mucho más interés a bucear en lo profundo de intestinos, hígados y corazón, destripando sentimientos, vivencias, mundos interiores y exteriores, amores y desamores, ruinas vitales y alegrías desaforadas.
En cuanto a los estilos tampoco se parecen mucho a sus abuelos musicales; unos son rockeros de toda la vida, otros se identifican con los sonidos folk y “alt country” tan de moda últimamente en los mundillos melómanos underground, y los últimos, los más jóvenes, hacen pop indie refinado.
Bueno, basta ya de pontificar, poner etiquetas, y de generalizar; escuchemos a un grupo de auténticos cantautores “escogidos”, así como alguna excepción, que se presentan “con nombre propio”.
LISTA DE CANCIONES:
1
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Jose Ignacio Lapido
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El mas alla
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2
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Josele Santiago
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Hagan juego
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3
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Fernando Alfaro
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Camisa Hawaiana de fuerza
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4
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Ivan Ferreiro
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Turnedo
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5
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Jose Ignacio Lapido
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La hora de los lamentos
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6
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Hendrik Röver
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No temáis por mi
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7
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Quique González
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Restos de stock
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8
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Pep Mirambell
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How I met your mother
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9
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Nacho Vegas
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La gran broma final
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10
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Manolo Tarancón
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Ya no volverás
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11
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Jonston
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Sherlock Holmes
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12
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Julio de la Rosa
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Sexy sexy sexy
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13
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Fernando Alfaro
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Hijo de perra
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14
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Quique González
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Pequeñas monedas y grandes mentiras
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